Mochilas de supervivencia para convertirte en el protagonista de una película de los 80
¿Qué ocurriría si sufriésemos una catástrofe natural, una pandemia con un virus desconocido hasta el momento (como el covid-19), una guerra mundial o algún desastre similar?
En las siguientes líneas te ayudaré a diseñar un plan de contingencia para ti y los tuyos, que te ayudará a cubrir como mínimo las primeras 72 horas de catástrofe gracias a una mochila de supervivencia que tendrá todo lo imprescindible.
¿No quieres ser un superviviente?
Con el paso de los años he ido aprendiendo infinidad de trucos de supervivencia, documentándome por mi cuenta y leyendo decenas de libros y guías al respecto.
En mochila de supervivencia no te voy a explicar cómo convertirte en un ranger o en un boina verde que se afeita en seco con el machete.
Lo que sí haré, es ayudarte.
He intentado condensar la información más importante, todo lo que he ido aprendiendo durante estos últimos años sobre supervivencia, y voy a tratar de facilitarte un poco las cosas.
Además, si eres de los más previsores y te gustan estos temas, también te daré algunos consejos para mantenerte a salvo y provisto en casa durante un mínimo de dos semanas.
Resumiendo: mochila 72 horas por un lado, plan 2 semanas libre de zombies por otro. ¿Sobrevives?
Sin duda, lo ideal sería que echases un vistazo a las dos opciones, ya que tendrías más posibilidades de sobrevivir ante un evento inesperado de magnitudes épicas.
Si te quedas en mi página, la revisas por completo y, finalmente, sigues pensando que no es necesario estar preparado por lo que pueda ocurrir, lamento decirte que algún día te arrepentirás, porque nuestro Gobierno no acudirá a salvarte como en las películas. ¡Suerte!
¿Estás preparado para sobrevivir?
Por desgracia, al mismo tiempo que vivimos en una época de abundancia, la gente no está preparada para cualquier tipo de catástrofe repentina.
Las personas que viven en los países desarrollados se han desconectado de los procesos de la civilización que la sustentan.
Es más, la mayoría de la población vive al día, incluso con ciertos problemas para llegar a final de mes.
Entonces, ¿cómo ni siquiera se plantean tener un plan de emergencia listo para cualquier contingencia?
No obstante, cada vez somos más los que nos preparamos ante una eventual catástrofre, ya que como dice el refrán:
“más vale prevenir que curar”
Sin ir más lejos, según esta noticia de Febrero de 2.020, en nuestro país puede haber unas 15.000 personas dispuestas para convertirse en supervivientes en el caso de una gran pandemia o catástrofe.
¿Y por qué prepararse para sobrevivir?
Todos y cada uno de nosotros deberíamos estar preparados sean cuales sean nuestras creencias religiosas, políticas, rango social, profesión, sexo, etc.
No podemos confiar simplemente en nuestros mandatarios, ya que llegado el caso de una catástrofe de dimensiones importantes, créeme, sólo podrás contar contigo mismo y con tu círculo más cercano.
Con tal de garantizar su supervivencia, el ser humano es capaz de hacer cosas inimaginables.
¿Cuánta gente conoces hoy en día que sea capaz de hacer fuego sin tener a mano un mechero? ¿Cuánta gente conoces capaz de curar una simple herida? ¿Has oído hablar de la maniobra de Heimlich?
Hemos perdido nuestras propias habilidades
Durante 250,000 años los humanos tuvieron que aprender a sobrevivir. Fuego, herramientas, armas, medicinas, refugios, caza, pesca, navegación, estructuras sociales, etc.
Incluso hace 100 años, la mayoría de la gente sabía lo básico para sobrevivir en una emergencia. Tus abuelos probablemente podrían cocinar desde cero, encender un fuego, limpiar un pescado o un conejo y reparar la ropa rota. ¿Tú puedes?
Por ejemplo, una encuesta de 2017 sobre las habilidades de supervivencia por generación descubrió que las personas nacidas antes de 1950 tenían tres veces más probabilidades de hacer cosas simples como atar un “nudo de supervivencia”.
Otro estudio reciente desveló que el 53% de los adultos americanos no tienen ni siquiera tres días de alimentos y agua no perecederos en sus casas. Incluso más del 80% no sabe cómo obtener alimentos y agua seguros en la naturaleza.
Seguro que en España esas cifras todavía son más altas.
Vivimos en un mundo impredecible y parece estar empeorando con el paso de los años. Dicho de otra manera: nuestra cómoda y placentera vida podría desaparecer en cualquier momento.
Nuestro planeta está cambiando debido al calentamiento global, causando desastres naturales más frecuentes y severos.
Así mismo, los principios fundamentales de la economía y lo que significa trabajar y vivir están cambiando rápidamente en formas que nunca hemos experimentado.
Seamos francos, nuestras instituciones y gobiernos están quebrados y no están abordando los problemas necesarios para solucionarlo, y aunque esperamos que todo finalmente se arregle, podría ser un proceso bastante complicado.
Por otro lado, claro está, algunos disfrutamos preparándonos para un posible contratiempo por un sinfín de razones.
En todos los casos, obtienes la tranquilidad de saber que estás listo y que no serás una víctima indefensa.
Cómo empezar a prepararte
Como todo en esta vida, comenzar algo suele ser costoso y se nos puede hacer cuesta arriba.
¿Cómo debemos prepararnos para algo que probablemente nunca suceda? ¿Es necesario?
Todos los 1 de Enero, año tras año, diseñamos una lista completa de objetivos para el año entrante:
- Hacer más ejercicio
- Pasar más tiempo con la familia
- No fumar
- Aprender idiomas
- Ser mejor persona
Realmente... ¿cuántos empezamos a cambiar desde el primer día para llevar a cabo esos objetivos?
No sé si habrá estudios o no que lo tengan calculado, pero apostaría a que es un porcentaje bajísimo.
Pues bien, prepararse para un posible evento catastrófico no debería ser simplemente un objetivo de año nuevo, debería ser obligatorio para todo ser humano.
Es más, me atrevería a decir que debería haber leyes en todos los países en las que NOS OBLIGARAN A PREPARARNOS.
Imaginemos que ahora nuestro Gobierno de turno nos dijera algo como ocurrió en 2.016 con Alemania:
"Alemania insta a acumular comida para diez días ante un posible ataque" El Gobierno aprueba un nuevo plan de defensa civil ante agresiones terroristas, ataques químicos, biológicos, nucleares o cibernéticos. Sustituye al plan de 1995
Ya me estoy imaginando a todo el mundo corriendo hacia Mercadona, a cargar como si no hubiera un mañana, atropellando con los carros a todo aquel que se interpusiera en su camino.
Comprando de todo sin pensar ni siquiera si es lo necesario o no.
Pues antes de que ocurra una situación de ese estilo, debemos prepararnos y tener siempre nuestras provisiones listas ante cualquier eventualidad.
Algo tan simple como tener un pequeño extintor en el coche o en la cocina ya es una preparación.
No se trata de tener a toda costa un búnker o un arsenal de armas como si fueras a invadir la ciudad de al lado.
Las especies que sobreviven no son las más fuertes, ni las más rápidas, ni las más inteligentes; sino aquellas que se adaptan mejor al cambio.
En la lucha por la supervivencia, los más aptos ganan a expensas de sus rivales porque consiguen adaptarse mejor a su entorno.